Agatha y Leonidas mantienen una relación madre-hijo un tanto absorbente: Agatha nunca volvió a enamorarse y Leonidas no sabe qué es el amor.De un día para otro, Agatha despierta en el cuerpo de una niña de siete años. La única solución posible tras haber blindado toda la casa con papel de diario, será l*r a Elisa, la otra hija de Agatha, que a pesar de haberse independizado hace tiempo, volverá al lecho materno a reparar heridas que quedaron abiertas.